Un día cualquiera, por Félix.



Hace más o menos 4 años llegué a Alume. Al principio vi mucha gente que no conocía hasta que los compañeros me fueron introduciendo en lo que era Alume. Pronto me fui metiendo en lo que eran los talleres como el de manualidades o el de cuero, dibujos con Josefa. Al principio no me gustaba mucho,  así que el año siguiente me cambiaron para otro taller de cuero lo que tampoco me ilusiona. Llegó el verano y a su vuelta me metieron en un curso de jardinería que fui superando con bastante esfuerzo, aunque lo aprobé y me gustó.
Una de mis actividades preferidas es prensa y la tenemos siempre a primera hora y consiste en coger en un trozo de periódico tanto La Voz de Galicia  como El Progreso y luego comentarlo para luego poner un titular en el tablón.
También a veces nos llevan al parque para despejarnos y hacer deporte o para ver ramas de árboles cuando estuve en el curso de jardinería.
A veces vamos a comer a algún bar, como cuando fue la despedida de Óscar, el profesor de jardinería.
Con tanta fiesta  también me tocó una cesta de carnavales, la cual estaba surtidas de muchas cosas ricas, por ganar el concurso de disfraces en el que iba de policía. En la cesta había de todo: cachucha, galletas, orejas.
Los días aquí pasan rápidos pues hace unos meses me cambiaron  el horario de Alume y también la medicación y por lo tanto estoy mucho mejor.

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